¿TU PADECES DIABETES? Elimínala de tu vida! Es más sencillo de lo que crees. Tal vez te hayan dicho que la diabetes no se puede curar, sigue leyendo y verás que curarse es muy sencillo.
Actualmente este padecimiento ocupa el primer lugar en los padecimientos de la población mexicana adulta, y con una incidencia cada vez mayor en niños (del tipo II). Se estima que es la principal causa de muerte y que afecta a un poco más del 10% de la población.
Con nuestro sistema podemos tratar exitosamente la diabetes tipo I y tipo II.
El sistema utiliza tanto una limpieza mental además de suplementos nutricionales, dependiendo del Tipo. No usamos fármacos.
En México se realizan diariamente cerca de 80 amputaciones diarias ocasionadas por este padecimiento ¡y todas se pueden evitar! Hemos visto como en un mes cierran cicatrices que llevaban más de 6 meses abiertas. Si conoces personas con este padecimiento dale esta información.
Las ventajas son:
* Elimina una enfermedad considerada crónica e incurable.
* RAPIDO la eliminación del problema en entre 1 y 3 meses dependiendo lo bien que se siga el proceso y el avance de la enfermedad.
* Se evitan cirugías y amputaciones de miembros.
* No se usan fármacos.
* La cicatrización y otras funciones de nuestro cuerpo recuperan su normalidad.
* Eliminas depresión, ansiedad y recuperaras TUS GANAS DE VIVIR.
Llama para hacer una cita o pide informes. A veces se requiere también el Nivel 2 y 3 de terapias.
La insulina es una hormona producida por el páncreas para controlar el azúcar en la sangre. La diabetes puede ser causada por muy poca producción de insulina, resistencia a ésta o ambas.
Para comprender la diabetes, es importante entender primero el proceso normal por medio del cual el alimento se descompone y es empleado por el cuerpo para obtener energía. Varias cosas suceden cuando se digiere el alimento:
Un azúcar llamado glucosa (la biomolécula mas sencilla y abundante en la naturaleza), que es fuente de energía para el cuerpo, entra en el torrente sanguíneo.
Un órgano llamado páncreas produce la insulina, cuyo papel es transportar la glucosa del torrente sanguíneo hasta el interior de las células de los músculos, de las de la grasa (adipocitos) y las células hepáticas, donde puede utilizarse como energía.
Las personas con diabetes presentan hiperglucemia, debido a que su cuerpo no puede movilizar el azúcar hasta los adipocitos, hepatocitos y células musculares para almacenarse como energía. Esto se debe a:
El páncreas no produce suficiente insulina.
Sus células no responden de manera normal a la insulina.
O una combinación de ambas.
Hay tres grandes tipos de diabetes. Las causas y los factores de riesgo son diferentes para cada tipo:
Diabetes tipo 1: puede ocurrir a cualquier edad, pero se diagnostica con mayor frecuencia en los niños, los adolescentes o adultos jóvenes. En esta enfermedad, el cuerpo no produce o produce poca insulina y se necesitan inyecciones diarias de esta hormona.
Diabetes tipo 2: corresponde a la mayoría de los casos de diabetes. Generalmente se presenta en la edad adulta, aunque ahora se está diagnosticando en adolescentes y adultos jóvenes debido a las altas tasas de obesidad. Muchas personas con este tipo de diabetes no saben que padecen esta enfermedad.
Diabetes Gestacional: es el azúcar alto en la sangre que se presenta en cualquier momento durante el embarazo en una mujer que no tiene diabetes.
La diabetes afecta a más de 20 millones de estadounidenses y alrededor de 40 millones tienen prediabetes (diabetes tipo 2 temprana).
Los niveles altos de azúcar en la sangre pueden causar diversos síntomas, como:
Visión borrosa
Sed excesiva
Fatiga
Micción frecuente
Hambre
Pérdida de peso
Debido a que la diabetes tipo 2 se desarrolla lentamente, algunas personas con niveles altos de glucemia son completamente asintomáticas.
Los síntomas de la diabetes tipo 1 se desarrollan en un período de tiempo corto y las personas pueden estar muy enfermas para el momento del diagnóstico.
Se puede utilizar un análisis de orina para buscar hiperglucemia; sin embargo, una prueba de orina sola no diagnostica diabetes.
El médico puede sospechar que usted tiene diabetes si su azúcar en la sangre es superior a 200 mg/dL. Para confirmar el diagnóstico, se deben hacer uno o más de los siguientes exámenes:
Exámenes de sangre:
• Glucemia en ayunas: se diagnostica diabetes si el resultado es mayor de 126 mg/dL en dos oportunidades. Los niveles entre 100 y 126 mg/dL se denominan alteración de la glucosa en ayunas o prediabetes. Dichos niveles se consideran factores de riesgo para la diabetes tipo 2.
• Examen de hemoglobina A1c:
o Normal: menos de 5.7%
o Prediabetes: entre 5.7% y 6.4%
o Diabetes: 6.5% o superior
• Prueba de tolerancia a la glucosa oral: se diagnostica diabetes si el nivel de glucosa es superior a 200 mg/dL luego de 2 horas (esta prueba se usa con mayor frecuencia para la diabetes tipo 2).
Las pruebas de detección para diabetes tipo 2 en personas asintomáticas se recomiendan para:
• Niños obesos que tengan otros factores de riesgo para diabetes, comenzando a la edad de 10 años y repitiendo cada dos años.
• Adultos con sobrepeso (IMC superior a 25) que tengan otros factores de riesgo.
• Adultos de más de 45 años, repitiendo cada tres años.
Si vemos nuestro cuerpo como una máquina, todas las máquinas tienen una computadora, un centro de mando. Mientras más automáticas sean, más importante es la computadora propia. Si no son automáticas se requiere del centro de mando que proporciona un cerebro humano. Entonces todas las máquinas tienen un “hardware” físico y un “software” que es información, lo mismo pasa con nosotros. Nuestro cuerpo y sus reacciones son el “hardware” y los programas que lo controlan es el “software”, en nosotros es la MENTE.
En nuestra mente existe una región que se encarga de regular TODOS LOS PROCESOS NO CONSCIENTES en nuestro cuerpo que van desde la presión arterial, temperatura corporal, metabolismo, etc., y desde luego el sistema inmunológico. Cuando existen errores de “programación” nuestro cuerpo comienza a manifestar esos errores como enfermedades. Entonces cuando se corrige la programación, como es lógico, la enfermedad desaparece o, sí se quitan en parte al menos disminuye.
En el caso de un paciente con diabetes estos “errores de programación o programas negativos” pueden hacer que nuestro sistema inmunológico ataque a las células productoras de insulina, provocando entonces diabetes tipo I. También puede ser que ataque a los receptores de insulina en el cuerpo con lo que la absorción de la glucosa dentro de las células se alenta y se provoca una diabetes tipo I.
Estos “programas negativos mentales” también pueden variar la frecuencia de vibración de los receptores lo que disminuye su afinidad por la insulina y generando también una diabetes tipo II.
El SOBREPRESO. Cuando una persona acumula grasa en el cuerpo y se empieza a hacer obesa, lo que está ocurriendo a nivel celular es que se están produciendo millones de células grasas, adipocitos, mismas que reclaman su parte de insulina, ya que también requieren glucosa para vivir. Esta demanda llega a superar la producción de insulina por el páncreas con lo que empieza a haber un faltante de insulina y se entra a un estado prediabético, que se revierte cuando el paciente baja de peso (con una adecuada nutrición y ejercicio). Sin embargo si este estado se mantiene mucho tiempo las células del páncreas pueden empezar a “reventar por exceso de trabajo” mueren, y el estado se agrava al disminuir drásticamente los niveles de insulina.
Desde luego existen programas mentales negativos que incitan a las personas a ingerir en exceso comidas chatarras, como en una adicción, generando el cuadro anterior.
Estos eventos pueden darse por separado o juntos.
¿No existe cura para la diabetes??? Claro que existe, el afirmar lo contrario es simplemente ignorar las causas.
Nuestro sistema empieza por hacer una limpieza mental que permite eliminar o desactivar los programas mentales negativos en el subconsciente que son la raíz del problema. Al mismo tiempo se usan técnicas para la regeneración del páncreas. Desde luego se tratará el sobrepeso.
En cuestión de 2 mes aproximadamente, siguiendo este sistema nuestros valores de glucosa en sangre serán normales, sin necesidad de medicamentos, ni inyecciones de ningún tipo y tendremos una mayor tolerancia a la glucosa. Desde luego el llevar una dieta sana no tiene por qué cambiar pero podremos darnos unos gustos extras.
Desde luego el tratamiento y su duración dependerá del paciente, el avance de la enfermedad y el hecho de que se siga el proceso.
La diabetes tipo 2 es una enfermedad que dura toda la vida (crónica) en la cual hay altos niveles de azúcar (glucosa) en la sangre. La diabetes tipo 2 es la forma más común de esta enfermedad.
Ver también:
• Diabetes
• Diabetes gestacional
• Diabetes tipo 1
• Síndrome metabólico
La diabetes es causada por un problema en la forma como el cuerpo produce o utiliza la insulina. La insulina es necesaria para mover el azúcar en la sangre (glucosa) hasta las células, donde ésta se almacena y se usa posteriormente como fuente de energía.
Cuando usted tiene diabetes tipo 2, la grasa, el hígado y las células musculares normalmente no responden a dicha insulina. Esto se denomina resistencia a la insulina. Como resultado, el azúcar de la sangre no entra en las células con el fin de ser almacenado para obtener energía.
Cuando el azúcar no puede entrar en las células, se acumulan niveles anormalmente altos de éste en la sangre, lo cual se denomina hiperglucemia.
Por lo general, la diabetes tipo 2 se desarrolla lentamente con el tiempo. La mayoría de las personas con esta enfermedad tienen sobrepeso en el momento del diagnóstico. El aumento de la grasa le dificulta al cuerpo el uso de la insulina de la manera correcta.
La diabetes tipo 2 puede presentarse también en personas delgadas y es más común en los ancianos.
Los antecedentes familiares y los genes juegan un papel importante en la diabetes tipo 2. Un bajo nivel de actividad, una dieta deficiente y el peso corporal excesivo (especialmente alrededor de la cintura) aumentan el riesgo. Ver también: diabetes tipo 2 para conocer una lista de factores de riesgo.
Con frecuencia, las personas con diabetes tipo 2 no presentan síntoma alguno al principio y es posible que no tengan síntomas durante muchos años.
Los síntomas iniciales de la diabetes pueden abarcar:
• Infección en la vejiga, el riñón, la piel u otras infecciones que son más frecuentes o sanan lentamente
• Fatiga
• Hambre
• Aumento de la sed
• Aumento de la micción
El primer síntoma también puede ser:
• Visión borrosa
• Disfunción eréctil
• Dolor o entumecimiento en los pies o las manos
El médico puede sospechar que usted tiene diabetes si su azúcar en la sangre es superior a 200 mg/dL. Para confirmar el diagnóstico, se deben hacer uno o más de los siguientes exámenes:
Exámenes de sangre para la diabetes:
• Nivel de glucemia en ayunas: se diagnostica diabetes si el resultado es mayor a 126 mg/dL en dos oportunidades.
• Examen de hemoglobina A1c:
o Normal: menos de 5.7%
o Prediabetes: entre 5.7% y 6.4%
o Diabetes: 6.5% o superior
• Prueba de tolerancia a la glucosa oral: se diagnostica diabetes si el nivel de glucosa es superior a 200 mg/dL luego de 2 horas.
Las pruebas de detección para diabetes se recomiendan para:
• Niños obesos que tengan otros factores de riesgo de diabetes, comenzando a la edad de 10 años y repitiendo cada dos años.
• Adultos con sobrepeso (IMC superior a 25) que tengan otros factores de riesgo.
• Adultos de más de 45 años cada tres años.
Usted debe ver al médico cada tres meses. En estas visitas, puede esperar que el profesional:
• Le revise la presión arterial.
• Le revise la piel y los huesos en los pies y las piernas.
• Le revise la sensibilidad en los pies.
• Le examine la parte posterior del ojo con un instrumento especial con luz denominado oftalmoscopio.
Los siguientes exámenes ayudarán a que usted y su médico vigilen su diabetes y prevengan sus problemas:
• Hacerse revisar la presión arterial al menos cada año (la presión arterial ideal debe ser de 130/80 mm/Hg o más baja).
• Hacerse revisar la hemoglobina A1c (HbA1c) cada 6 meses si la diabetes está bien controlada; de lo contrario, cada 3 meses.
• Hacerse revisar los niveles de colesterol y triglicéridos anualmente (procure lograr niveles de colesterol por debajo de 70-100 mg/dL).
• Hacerse exámenes anuales para verificar que los riñones estén trabajando bien (microalbuminuria y creatinina en suero).
• Visitar al oftalmólogo al menos una vez al año o con mayor frecuencia si tiene signos de retinopatía diabética.
• Visitar al odontólogo cada 6 meses para una limpieza y examen dental completos. Asegúrese de que el odontólogo y el higienista sepan que usted padece diabetes.